Move on

  Sí, nosotros también tuvimos nuestra escena en un baño. Claro, pero vos estabas borracho y también fue bastante incómodo. Tenemos momentos lindos para recordar, ¿no es cierto? Pero en la vida es necesario avanzar, no estar mirando todo el tiempo hacia atrás. 
  ¿Dí poco de mí?, ¿nada? ¿Te he decepcionado con mis errores? La verdad es que vos también me has defraudado muchísimo. Son cosas que pasan, diría una amiga. Y hoy entiendo que el let it be siempre fue la mejor opción. Me ha gustado forzarte a actuar, pedí sin intentar aportar nada de mí. Me has herido, te he rasguñado; me has dado más de lo que esperé y yo he logrado que mis gritos te hicieran reaccionar. ¿Intentaste dejarlo todo por mí, digo, realmente, sin dudarlo siquiera? ¿Lo he estropeado? 
  Es que la esencia de las personas no puede ser modificada. Siempre serás la misma persona y yo siempre seré lo que soy. Bueno o malo, es lo que somos y lo que no logramos aceptar del otro. ¡He aquí el gran dilema! ¿Tenías miedo? Yo también. De todos modos, ya es tarde. 
  Seamos sinceros, no nos ha ido tan mal. Vos te fuiste corriendo a los brazos de aquella que no comete errores, que es la reina de la virtud y que te ama con su alma. ¿No se te ha puesto muy difícil, a que no? Y yo, que creí que me iba a desangrar, avanzo a paso gigantesco y por ningún motivo me voy a dejar caer. Me divierto bastante, sonrío de corazón. Y si bien te extraño, no voy a morirme de amor. Ya nunca más. 
  Mi progreso se debe mucho a vos, debo admitir. Me has recordado que es necesario apreciar a quienes están a mi alrededor, a los que no se fueron, a los que se quedan, a aquellos que me quieren. 
  No estoy triste, no por lo menos hoy. Me acuerdo de vos a menudo, pero ese recuerdo ya no duele, sino que, al contrario, me hace sonreír..